Llega un momento en que por más que te esfuerces la mediocridad harta.
¿Por qué te conformas y renuncias a la excelencia en todos los ámbitos de tu vida?
Se sibarita, el precio es tu decisión.
Es más fácil entender porque estamos donde estamos que hacia donde nos dirigimos
Siempre llegamos a donde nuestras decisiones nos han llevado…y no siempre es ese el lugar que planificamos.
Hay veces que nos encerramos tanto en nosotros mismos que no nos damos cuenta de que hacemos daño a los que nos rodean.
Llega un punto en el que somos capaces de dejar atrás lo que tenemos para ir en busca de lo que anhelamos.
Cuando lo que antes nos ilusionaba ahora nos produce tedio , estamos en el camino de poder dejar atrás un capitulo de nuestra vida e iniciar un capitulo nuevo. Necesita de maduración….pero ya no hay retorno al pasado, cuanto más… permanecemos en el transito más nos debilita y amarga.
Recuerda que sólo llegan al alma las caricias que salen de ella, lo demás son espejismos que nos llenan de insatisfacción y amargura.
¿En tus relaciones acabas siempre saliéndote con la tuya?
¿eres egoísta con quienes te aman?
Si es así, aún no has comprendido que la verdadera satisfacción no está en coger de quienes te aman sino en compartir con quienes te aman
«ganando» acabas perdiendo.
Cuando no sabemos valorar lo que recibimos, el universo acaba quitandonoslo.
No solo hemos especulado con la economía y el poder….también hemos especulado con los sentimientos y los valores El resultado es más que evidente.
El cambio anunciado por los Mayas se esta produciendo de manera inexorable y cuando llegue el 21 de diciembre del 2012 ya se habrá consumado. Quien espere grandes cataclismos físicos no ha entendido nada, el gran cambio es a nivel interno.Este cambio no siendo físico es mucho más devastador.
Un cataclismo físico vivido desde la solidaridad, la generosidad, la ética, el amor y el compromiso es infinitamente más suave que el mismo cataclismo vivido desde el egoísmo, la codicia y la avaricia, la ira, la soberbia y el odio
Cuanto más tardemos en asumir este cambio más padecemos y más duro lo hacemos